Cuando alguien dice que la verdad es relativa, lo que normalmente quiere decir es que no hay verdad absoluta. Algunas cosas pueden parecer ser verdaderas para uno, pero no para otro. Si uno lo cree, eso es verdad. Si otro no lo cree, no es verdad. Cuando las personas dicen cosas como: "Está bien si para usted la Biblia es la Palabra de Dios, pero para mí no lo es", están expresando la creencia posmoderna de que la verdad es relativa. Todo el concepto de la "verdad relativa" suena tolerante y de mente abierta, sin embargo la afirmación "la verdad es relativa" es, en realidad, una declaración de auto-rechazo, una contradicción. Es decir, al afirmar "la verdad es relativa", se está afirmando una verdad absoluta.
“La verdad es discriminatoria. La verdad hace distinciones precisas entre el bien y el mal. Nunca es tanto lo uno como lo otro, y siempre es o lo uno o lo otro. La verdad no es relativa, arbitraria o condicional. Siempre es concluyente e incondicional. Todo lo que está fuera de ella es falso por definición, mientras que todo lo que está dentro de la verdad es cierto”. Steven Lawson
La verdad
El posmodernismo, en pocas palabras, postula que no podemos conocer la verdad, que no podemos tener acceso a ella por nuestra incapacidad de superar nuestros prejuicios y quitarnos los lentes con los cuales interpretamos la realidad. Sin embargo, el posmodernismo esconde una contradicción obvia. Si hacemos la afirmación «no podemos conocer la verdad», en realidad estamos haciendo una afirmando absoluta: que la verdad no puede ser conocida. Como seres humanos limitados, no podemos afirmar que conocemos toda la verdad, pero podemos afirmar que hay cosas verdaderas que podemos descubrir. Esto es cierto tanto en el mundo físico (Ley de la Gravedad, Termodinámica, etc.) como en el mundo abstracto (números o ideas). Por lo tanto, podemos conocer la verdad sobre la realidad, incluidas afirmaciones morales y espirituales.
Una única verdad
Del mismo modo, hay una evidente contradicción en la afirmación «cada quien tiene su propia verdad». En el fondo, se trata de una afirmación objetiva y universal que implica ser verdadera y aplicarse a todos por igual. Es decir, los mismos postulados posmodernistas relativistas descansan sobre un pilar inamovible e imposible de negar: la existencia de la verdad absoluta.
La realidad
Supongamos que dos personas están de visita en París, suben a lo más alto de la Torre Eiffel y uno decide saltar al vacío dado que, según su verdad, creía que la Ley de la Gravedad no existe. El ejemplo puede parecer exagerado, pero la idea es simple: la Ley de la Gravedad es verdad, es absoluta, y se aplica para todos por igual, sin importar la nacionalidad, la cultura, la etnia, el sexo, edad, contexto socioeconómico o religión. Las ideas que creemos y afirmamos, se ajusten a la realidad o no, tienen consecuencias.
La Ley de la No Contradicción
La existencia de la verdad absoluta y objetiva encaja lógicamente con la realidad. ¿Existe la verdad absoluta? Solo hay dos posibles respuestas a esta pregunta: sí o no. La Ley lógica de la No Contradicción establece que dos ideas opuestas no pueden ser ambas verdaderas al mismo tiempo y lugar bajo las mismas condiciones. En otras palabras, 2 + 2 no puede igualar 4, y 2 + 2 igualar a 5 al mismo tiempo y bajo las mismas condiciones. Debe ser uno o el otro: 4 ó 5. O la Ley de la Gravedad existe o la Ley de la Gravedad no existe. No puede existir y no exisitr al mismo tiempo. Lo mismo aplica con las leyes morales. O algo es bueno o algo es malo. Una acción o comportamiento sexual no puede ser bueno y malo al mismo tiempo. La Biblia, como Palabra de Dios, no puede ser verdadera y falsa al mismo tiempo. Hay una verdad absoluta, algo que es verdad en todo momento y lugar, o no la hay. Argumentar con certeza que no existe la verdad absoluta es hacer una afirmación absolutamente verdadera y, por lo tanto, se refuta a sí misma. Por lo cual, la única opción que queda es que la verdad absoluta existe.
"Si hay una característica imperante en la cultura moderna es el relativismo moral. Sin embargo, es uno de los «ismos» más fáciles de desbaratar. ¿Por qué? Porque, a pesar de lo que una persona dice que cree, frente a una crueldad genuina, nadie sigue siendo relativista moral". Nancy Pearcey
Al hablar de la verdad, los lectores de la Biblia a menudo primero piensan en la pregunta de Pilato a Jesús en Juan 18:38: "¿Qué es la verdad?". Todavía hoy, muchos luchan con que si existe algo que sea absolutamente verdadero o falso o si la verdad misma siquiera existe. La verdad es un tema espiritual y también filosófico, con implicancias en la eternidad. Jesús afirmó ser el camino, la verdad y la vida (Juan 14: 6). Si Él es la verdad, entonces la respuesta adecuada sería seguirlo a Él y Sus enseñanzas. Los cristianos deberían preocuparse por la verdad objetiva porque hacen la increíble afirmación de que el cristianismo es la verdad y Cristo es el único camino hacia Dios y la vida eterna en el cielo. Esas son afirmaciones exclusivas. La verdad absoluta sí existe, como existen las consecuencias de estar equivocado. Por lo que como cristianos debemos presentar la verdad de las Escrituras, del Evangelio de Jesucristo, en verdad y en amor.
Fuentes:
4. Francis A. Schaeffer, Escape from Reason, in The Schaeffer Trilogy, Crossway, 1990, pág 218.
6. R. Scott Smith, Postmodernism in the Church, Crossway Books, 2005, pp. 2807-2813.
7. J.P. Moreland, Love Your God with All Your Mind, NavPress, 2012, pp. 398-438.
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